sábado, 25 de abril de 2009

Nevermore

Ala de sombra, un cuervo -que crascita
Nunca- repite su áspero graznido
a través de mi día mal vivido
y de mi noche a solas, infinita.

En su agorera convicción imita
mi doble desaliento persuadido
de que nunca la tierra que he tenido
podrá tenerme en pie, que está proscrita.

Nunca... Pico de grajo, el pensamiento
-corvo, corvino- escarba... Lo que siento
sólo puede decirse en ese nunca

-cuervo de negra luz, empobrecida
pitanza, interminable despedida-
que tiene el nombre de mi nombre: Nunca.

Juan José Domenchina.

No hay comentarios: