jueves, 31 de julio de 2008

[Soneto XXIII]

En tanto que de rosa y azucena
se muestra la color en vuestro gesto,
y que vuestro mirar ardiente, honesto,
con clara luz la tempestad serena;

y en tanto que el cabello, que en la vena
del oro se escogió, con vuelo presto,
por el hermoso cuello blanco, enhiesto,
el viento mueve, esparce y desordena;

coged de vuestra alegre primavera
el dulce fruto, antes que el tiempo airado
cubra de nieve la hermosa cumbre.

Marchitará la rosa el viento helado,
todo lo mudará la edad ligera,
por no hacer mudanza en su costumbre.

Garcilaso de la Vega (1501?-1536). Publicado en 1543.

2 comentarios:

Raúl dijo...

La poesía, es una expresión que me supera, por inalcanzable. Asún así, sé disfrutar del placer y el deguste de unos buenos versos.
Gracias por tu visita.

Carlos Castedo dijo...

La poesía nos supera a todos, incluso a los poetas.