jueves, 19 de junio de 2008

Nanas para dormir desperdicios de Francisca Aguirrre

Nacida en Alicante en 1930 e hija del pintor Francisco Aguirre, su primer poemario fue Ítaca (1972), premio Leopoldo Panero 1971.

Pertenece por fecha de nacimiento a la generación del 50, la de Gil de Biedma, Valente..., pero publicó con los novísimos y ella misma se considera de la generación del 98. En cualquiera de ellas, opta por mirar de frente a la historia, con rabia pero sin odio, y reflexionar existencialmente en sus versos.
No demasiado pródiga en títulos, a Ítaca siguieron Los trescientos escalones (1977), Premio Ciudad de Irún 1976, dedicada a su padre, condenado a muerte por el franquismo, La otra música (1978), Ensayo General (1996), Premio Esquío 1995 y Pavana del desasosiego (1999), Premio María Isabel Fernández Simal 1998. Recopilados todos, afortunadamente por la difultad de encontrarlos hoy, en Ensayo General. Poesía completa (1966-2000) [2000].
En pocos meses, ha presentado La herida absurda (2006) y Nanas para dormir desperdicios (2007), Premio Alfons el Magnànim. Este último convoca la naturaleza mediante lo residual -el presente-, los desperdicios -el tiempo de desdicha que se ha sido- y los despojos -la reflexión existencialista- utilizando versos largos que adoptan forma de nana para acunar las pérdidas.
Ha publicado también un libro de recuerdos, Espejito, espejito (1995) y uno de relatos, Que planche Rosa Luxemburgo (2002).
Hiperión, 64 páginas, 7,00 € , ISBN: 978-84-7517-817-2.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me recuerda con tanto desasosiego al Pessoa más existencialista, aunque imagino que no tienen mucho que ver. ¿Tienes algún libro de ella para dejarme? Ya sé, que tengo pelis para devolverte, pero tranquilo que están magníficamente cuidadas. Ya hablamos...