Que otras vidas más hondas sofoquen mi nostalgia
y que el don del valor me sea concedido.
Que el amor se engrandezca y sea fiel y dure
y que ajenos paisajes impidan la tristeza.
Que el olvido y la muerte, que el tiempo y el dolor
formen por esta vez en el bando vencido.
Que las luces se apaguen, y en la noche del cine
una breve mentira nos convierta en más vivos.
Carlos Marzal. El último de la fiesta (1987).
2 comentarios:
Me ha gustado..la verdad!! Necesitamos llenarnos de optimismo.
Optimismo o...
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