No es bueno andar por este mundo
soportando el desgaste de nuestra sombra.
No es bueno alzar la voz a nuestras vísceras
inaugurar un grito que hace crujir
tan sólo a nuestro despavorido bazo.
No es bueno andar en soliloquio
con el filo mugriento del desdén.
No es bueno ser residuo de un espejo:
trae mala suerte esa mutilación
con apariencia de totalidad.
No somos de fiar con tanta arista,
somos humanamente peligrosos
y desdichados inhumanamente.
Entonces, con la humildad que otorga la desolación:
compañero, cualquier pedazo de hilo,
cualquier trapo para remendar
este agujero que llamamos vida.
Francisca Aguirre. La otra música (1978).
2 comentarios:
Estos versos me han encantado. Tengo que pedirte más información sobre la autora. Ya hablamos..
Publicaré un microperfil en breve.
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